Las úlceras por presión... ¿prevenibles?

     Las úlceras por presión son "lesiones de origen isquémico que se localizan en la piel y tejidos subyacentes con pérdida de sustancia cutánea producida por el mantenimiento de una presión prolongada, o fricción entre dos planos duros". Son heridas crónicas que requieren de alto gasto sanitario y un dato importante: EL 95% DE ÚLCERAS POR PRESIÓN SON EVITABLES.

     Como en todo proceso fisiopatológico, existen multitud de factores de riesgo, entre los que se encuentran: trastornos del transporte de oxígeno, trastornos inmunológicos, arrugas en la ropa, inmovilidad, sondajes,...

     Como insistimos en que el eje principal para el tratamiento de las úlceras es su prevención, en primer lugar, el profesional de enfermería debe de realizar una valoración completa, que debe de comprender:

• Valoración de la causa para poder tratar la úlcera
• Identificación y tratamiento de la enfermedad, si procede
• Estado nutricional
• Dolor
• Aspectos psicosociales

     Las dos escalas más utilizadas son las escalas de Braden y Norton. Además de la valoración se puede realizar una analítica sanguínea con hemograma, bioquímica, coagulación y VSG.

     El profesional de enfermería tiene la responsabilidad de la prevención de aparición de este tipo de lesiones, sobre todo en pacientes geriátricos con mayor o menor grado de inmovilidad. Por ello, la prevención debe de constar con los siguientes items, entre otros:

• Inspección sistemática de la piel una vez al día por lo menos.
• Limpiar la piel con agua tibia y jabón neutro.
• Hidratación de la piel
• Reducir al mínimo la fricción y rozamiento con movilización correcta.
• Mejorar la movilidad
• Mejorar el estado nutricional
• Cambios posturales cada dos horas.
• Colocar dispositivos de apoyo que disminuyan la presión

    Como hemos mencionado, el profesional de enfermería es el único responsable de las úlceras por presión, así como su prevención y tratamiento. Quisiera hacer hincapié en que una buena y correcta valoración del estado general del paciente anciano de forma continuada, es IMPRESCINDIBLE y FUNDAMENTAL para prevenir la aparición de este tipo de heridas, además de ser un item de la calidad de la asistencia sanitaria a nuestros mayores. 

     

BIBLIOGRAFÍA:

• Tratado de Geriatría para residentes [Internet]. Madrid: Sociedad Española de Geriatría y Gerontología [acceso el 24 de febrero de 2012]. De Arango C, Fernández O, Torres B. Úlceras por presión [10]. Disponible en: http://www.segg.es/download.asp?file=/tratadogeriatria/PDF/S35-05%2021_II.pdf
• Grupo Nacional para el Estudio y Asesoramiento en Úlceras por Presión y Heridas Crónicas (GNEAUPP). Directrices Generales sobre tratamiento de las úlceras por presión. Logroño; 2003 [acceso el 25 de febrero de 2012]. Disponible en: http://www.gneaupp.org/webgneaupp/index.php
• Salgado Alba A, Guillén Llera F, Ruipérez I. Manual de Geriatría. 3.ª ed. Barcelona: Masson; 2002.
• García FJ, López F, González E, Romero P, Martínez MC, Flores JM. Protocolo de prevención y tratamiento ante úlceras por presión. Nure Investigación [revista en Internet] 2008 [acceso el 24 de febrero de 2012]; 36: [12]. Disponible en:  http://www.fuden.es/FICHEROS_ADMINISTRADOR/PROTOCOLO/protocolo_3636200811350.pdf